Los afiches, que llevaban la leyenda “Victoria Conducción”, aparecieron este viernes sobre Avenida Rivadavia, en las inmediaciones del Congreso, y generaron nuevas especulaciones sobre la posibilidad de un acercamiento de Villarruel a un sector del peronismo.

Desde el entorno de la vicepresidenta, de todos modos, desmintieron haber sido los responsables de la campaña: “No tenemos nada que ver. No tenemos tan mal gusto”, expresaron ante la consulta de la Agencia Noticias Argentinas.

En los afiches, que luego fueron retirados por militantes de Villarruel, tenían las leyendas “Dios, Patria y Familia” y las figuras de José de San Martín, Manuel Belgrano, Juan Domingo Perón y José Ignacio Rucci, además de contar con la firma del Movimiento Justicialista Nacional

La campaña apareció en momentos en que Villarruel es mirada con recelo por un sector de Casa la Rosada, acusada de impulsar su propia figura lejos del presidente Javier Milei.

En efecto, la diputada libertaria Lilia Lemoine, cercana a Milei, fustigó a la vicepresidenta al calificar de “domadora de bombillas” que lanza su “candidatura”.

“Con cosplay de gaucho lanza su candidatura la domadora de bombillas junto a la agrupación de su mano derecha, Claudia Rucci”, expresó Lemoine desde sus redes sociales, donde suele cargar contra Villarruel.

Por la tarde, integrantes de la agrupación política La Derecha Argentina descolgaron los afiches y responsabilizaron al kirchnerismo por la maniobra con una referencia directa la ex presidenta Cristina Fernández: “Entendemos que tienen una candidata mediocre y condenada, pero no vengan a colgarse de Victoria”, expresaron. 

“Los mismos de siempre, los que nos dejaron un país destruido, haciendo lo que siempre supieron hacer mejor: seguir destruyendo. Vinimos a sacar la basura”, indicó el espacio en un video publicado en las redes sociales.

Desde la oficina de Villarruel en el Senado habían desestimado, ante la consulta de la Agencia Noticias Argentinas, la participación del sector en la aparición de los afiches, además de apuntar al espacio peronista de Guillermo Moreno. 

Pero Moreno también negó rotundamente una participación en la campaña, al advertir a esta agencia: “No tengo para los carteles nuestros, ¿voy a tener para ellos?”. 

Pese a la escalada de tensión, se pudo saber que hubo conversaciones entre Milei y representantes de Villarruel para atenuar el malestar y convivir en armonía.

“Nadie que haya hecho campaña con Victoria puede creer que eso es nuestro”, insistieron las fuentes, y agregaron: “Si esto perjudica el acercamiento es porque quienes hicieron los carteles lograron su cometido”.

Aclaraciones

Por otro lado, la vicepresidenta tomó el jueves una decisión de no quedarse en silencio ante las fuertes acusaciones que lanzó Javier Milei y que expuso a cielo abierto la ruptura del binomio que ganó, hace un año, las elecciones con el porcentaje más alto desde la recuperación democrática, en 1983. Todavía no resolvió cómo, ni cuándo, pero sí que hará “aclaraciones” sobre algunos de los dichos del presidente de la Nación.

En el entorno de la titular del Senado, de todos modos, aseguran que la intención es evitar una escalada política que agrave aún más una situación que viene en deterioro progresivo y, por ahora, tiene características de ser irreversible.