En un partido friccionado y sumamente parejo, el “Fortín” y el “Ferroviario” no se sacaron ventajas en los primeros 15 minutos, teniendo los de Liniers un claro mano a mano en los pies de Maher Carrizo que el arquero Luis Ingolotti contuvo.

Sobre el final, Central Córdoba tuvo su chance con una increíble chilena de Favio Cabral que el arquero Tomás Marchiori evitó que sea gol.

En el complemento, a los 9 minutos, Matías Godoy abrió la cuenta para el “Ferroviario” con un gol de otro partido. En un contragolpe, la pelota le llegó al delantero sobre la derecha del campo velezano y le pegó al arco cruzado, de larga distancia, con la fortuna de que la pelota se terminó colocando en el ángulo izquierdo del arquero Marchiori.

En lo que quedó de partido, Vélez fue por el empate, pero no encontró ni claridad ni profundidad para quebrar la resistencia defensiva de los santiagueños.

El juego se hizo más luchado que jugado, y eso benefició a Central Córdoba, que logró consumir los minutos de juego para consagrarse, por primera vez en su historia, con un título del fútbol argentino de la máxima división.

Para Vélez le quedó toda la presión, porque de un posible doblete ahora tiene que ganar el domingo en su cancha si quiere ser el campeón de la Liga Profesional. El rival es Huracán, que está a dos puntos y puede arrebatarle el objetivo o dejarlo en manos de Talleres, que también es puntero y juega en us cancha ante Newell’s de Rosario.