Como se ha visto muchas veces. Parejas jóvenes, adolescentes en grupo, papás con hijos pequeños. Muchos mirando vidrieras, eligiendo lo que se podía comprar en base a las posibilidades económicas y, claro, buscando las mejores alternativas.
Una vez más las “vedettes” fueron las promociones bancarias, fundamentalmente la del Banco de La Pampa, que en la Provincia marca la tendencia por la cantidad de comercios adheridos y las distintas alternativas de compra, con 20 cuotas y un bajo porcentaje de interés (posibilidad elegida mayoritariamente por quienes gastaron un poco más) o las cuotas sin interés, con devolución de un porcentaje del dinero gastado .
Claro que los comercios elegidos por los clientes fueron de los más diversos. Algunos prefirieron comprar alguna “pilcha”, otros fueron por el calzado, varios por teléfonos o algo de electrónica y hubo quienes se inclinaron por algún reloj, anillo, aros o cadenitas.
Pero el sol “salió para todos”, porque el “derrame” de la jornada previa al Día de la Madre fue recogido en parte también por quienes tiene a su cargo atender las confiterías céntricas, cuyas mesas situadas en el exterior por momentos estuvieron con un alto porcentaje de ocupación, ya que la temperatura de la tarde (algo calurosa) ameritaba para que los compradores de presentes hicieran un alto y optaran por una refrescante recompensa.