LUNES 27 de Enero de 2025
 
 
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A 28 años de su asesinato 

Reporteros, periodistas y autoridades recordaron a José Luis Cabezas en Pico

El periodista Miguel Busso fue el único orador en el marco del acto organizado por la Municipalidad de General Pico. Puso de relieve lo complejo del escenario actual para quienes llevan adelante esta profesión. Se plantó un árbol en memoria de reportero ultimado en Pinamar.

A 28 años de la muerte de José Luis Cabezas, reporteros gráficos, periodistas y funcionarios participaron del acto donde se recordó al profesional que trabajaba para la Revista Noticias. La actividad tuvo lugar en la plazoleta que lleva su nombre, situada en las calles 10 y 35, donde se emplaza su monolito.
Cabezas pagó el precio más alto por su compromiso con la verdad y la justicia cuando fue atacado en la mañana del 25 de enero de 1997, en Pinamar, cambiando para siempre la historia del periodismo argentino, constituyendo el más brutal crimen contra la libertad de prensa sucedido en democracia. A raíz de ello, fue establecida esta fecha como el Día del Reportero Gráfico.
La intendenta Fernanda Alonso encabezó este acto homenaje acompañada de funcionarias y funcionarios del ejecutivo municipal, autoridades provinciales y de entidades intermedias, reporteros gráficos y periodistas.
Miguel Busso tuvo a cargo las palabras alusivas a la fecha, realizando un repaso por su experiencia laboral junto a reconocidos reporteros gráficos piquenses.
Luego, expresó: “Este es un día muy sentido y celebro que estemos realizando este acto conmemorativo. José Luis Cabezas fue un luchador, una persona comprometida con lo que hacía, por eso no tenemos que olvidarnos de él y eso abarca otras cuestiones que tienen que ver con nuestra actividad, que hoy está atravesando un proceso muy crítico”.
“Queremos honrar su coraje y que nunca más tengamos otro 25 de enero de 1997, no queremos retrocesos de ningún tipo y tampoco que vuelvan muchas cosas que algunos están proponiendo. Y, por supuesto, no se olviden de Cabezas”, cerró Miguel Busso.
Al finalizar el discurso, se procedió a la colocación de las ofrendas florales al pie del monolito y se realizó un minuto de silencio.
A modo de cierre y como sucede cada año, se plantó un árbol para mantener viva la memoria de José Luis Cabezas.

 

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